La designación de un Delegado de Protección de Datos (DPD) es una obligación para ciertas organizaciones según el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD). ¿Pero quién es responsable de hacer esta designación?
Primero, cabe destacar que la designación de un DPD es obligatoria para aquellas organizaciones que manejan grandes cantidades de datos personales, como empresas, organizaciones gubernamentales y ciertas organizaciones sin fines de lucro.
En segundo lugar, es el responsabilidad del responsable del tratamiento de los datos (es decir, la organización que decide cómo y por qué se recopilan y procesan los datos), designar un DPD si se cumplen los criterios antes mencionados.
Por último, es importante señalar que el DPD debe ser una persona cualificada y con experiencia en materia de protección de datos, y su designación debe ser notificada a la autoridad de protección de datos correspondiente.
En resumen, es la organización que maneja los datos la responsable de designar un DPD si se cumplen los criterios establecidos por el RGPD. Es fundamental que la persona designada tenga la cualificación adecuada y que se notifique su designación a la autoridad de protección de datos.